Sistema ERP y las ventajas de una buena estrategia I
Una de las partes más importantes a la hora de administrar y dirigir un negocio, no importa cuál sea su tamaño, es la estrategia. Esta palabra ha sido clave para las empresas más grandes que existen hoy en día. Sin ella, una empresa es como un barco a la deriva.
Si bien es cierto que, para muchos, un buen estratega nace y no se hace, siempre hay recursos que le pueden ayudar a cualquier persona a tener una mejor visión y control sobre sus activos. Tal es el caso de un sistema ERP. Con una herramienta de este tipo, te puedes ubicar en una posición privilegiada para poder desarrollar una estrategia que realmente le ayuda a tu empresa a sobresalir.
Antes que nada, les vamos a recordar qué es un sistema ERP. El nombre proviene de las siglas en inglés de planificación de recursos empresariales y, con este nombre, queda a la vista cuál es su función. Esta herramienta, en la actualidad, funciona a base de un software en el que se introducen los datos necesarios para el funcionamiento del sistema. Además, muchos de estos programas pueden funcionar en la nube, otorgando un gran valor agregado a sus usuarios, pues pueden acceder a su información en el momento y lugar que sea necesario.
Justamente esa es una de las primeras ventajas de esta tecnología, puede proveer información confiable, siempre y cuando se le utilice de manera correcta. Como hemos dicho en anteriores entradas de este blog, la tecnología es tan confiable y segura como la persona que la esté operando. De esta manera, si existe un error humano, el sistema va a operar de manera incorrecta.
Para que la información sea confiable, se debe de contar con una base de datos común entre los usuarios, que sea alimentada por datos consistentes y lo más exactos posible. Otra parte importante para el manejo adecuado de un sistema ERP es la búsqueda de la mejora continua. Como en muchos otros aspectos de un negocio, como de la vida en general, la mejora continua asegura que siempre se estará optimizando el sistema ante, ya sean, pequeños errores o áreas donde se puede maximizar el beneficio.
De este beneficio devienen muchos otros. Por ejemplo, la reducción del tiempo y costos de entrega y operaciones en general. Al tener información fidedigna disponible en todo momento, la operación, por consecuencia, se hará más eficiente y se eliminan los problemas de comunicación entre las distintas áreas de la empresa.
También es de notarse que, la mayoría de estos sistemas están diseñados con una gran capacidad adaptativa. Es decir, están pensados para funcionar en distintos tipos y tamaños de empresas, por lo que cubren de manera eficiente la eventual posibilidad de expansión o crecimiento de tu empresa. Ya sea que quieras abrir nuevas sucursales o ampliar tu planta laboral, con un sistema de este tipo, el proceso será más fácil.
Estas son solo algunas de las ventajas que un sistema ERP ofrece a tu empresa. En la segunda parte de este blog abordaremos algunos otros beneficios, así como las precauciones que debes tomar al usar esta herramienta.