Los usos de un monedero electrónico en mi negocio
Sin dudas, podríamos decir que las tarjetas magnéticas cambiaron el mundo de los negocios. Son prácticas, baratas y ofrecen amplias soluciones. Por esta razón, el monedero electrónico se ha vuelto muy popular en los últimos años.
La tecnología detrás de un monedero electrónico es muy simple y sus aplicaciones son extensas. Simplemente, se trata de una tarjeta de plástico con una banda magnética o un chip en uno de sus extremos. Las aplicaciones son muy variadas, desde el transporte público, varios sistemas de transporte de la Ciudad de México utilizan tarjetas magnéticas para cobrar el acceso a los usuarios.
Entre las grandes ventajas del uso de este sistema se cuentan la practicidad, pues es una tarjeta pequeña y delgada, que no se tiene que cargar con efectivo, lo cual puede ser un alivio para la seguridad de muchas personas. Incluso, muchas empresas, que otorgan prestaciones a sus trabajadores, como vales de despensa o gasolina, decidieron adoptar los monederos electrónicos para llevar un mejor control de sus gasto.
Pero, en tu negocio, ¿Cómo podrías usar una tarjeta electrónica? ¿Qué uso le podrías dar?
Nosotros te vamos a dar un par de ideas para que, a partir de ellas, des rienda suelta a tu creatividad.
Un monedero electrónico que acumule puntos para tus clientes frecuentes. Esto no es lo más innovador, lo sabemos. Sin embargo, un programa de lealtad siempre da buenos resultados, cuando está bien ejecutado. Sería tan fácil como agregar ‘puntos’, si es que te sientes más cómodo refiriéndote al dinero de esta manera, cada que tus clientes realicen una compra. O, si hay algún producto que no se está vendiendo tan bien como esperabas, puedes decir que ese producto te da puntos dobles. Además, lo bueno de un monedero para clientes frecuentes es que aplica en casi todo tipo de negocios. Desde una cafetería hasta una tienda de accesorios automotrices, pueden usar este sistema para crear fidelidad con sus clientes y hacer de su experiencia de compra una situación más divertida.
Otra gran idea es una tarjeta de regalo. Simplemente necesitas un monedero electrónico común y corriente. En este, tus clientes recargarán la cantidad que ellos quieran, para después poder regalarlo a sus amigos o familiares. Puedes acompañarlo de una tarjeta o envoltura especial, para hacer sentir a tus clientes que realmente es una ocasión extraordinaria. Esta idea puede ser aplicada en muchos negocios, pero resulta más lógico que te regalen una tarjeta de regalo de un restaurante o una tienda de discos, que de un expendio de abarrotes, ¿no? Sin embargo, no te dejes limitar. Tan solo es cuestión de que fluya tu creatividad para que logres esa gran idea que va a darle un enorme impulso a tu negocio.
Entonces, lo único que necesitas para usar un monedero electrónico es mucha creatividad y ganas de hacer que tu negocio resalte entre toda la competencia.